Quería desintoxicarme después del empacho de "Rey Blanco" y me topé con esta novela de Juan Madrid de oferta. Recordé el buen sabor de boca que me dejó una de sus novelas de la serie de Toni Romano, "Un beso de amigo", que leí hace muchos años, deben de ser muchos porque las páginas están amarillentas y el libro es de 1980.
No me he equivocado y ha sido un buen colutorio y ha eliminado mi mal sabor de boca totalmente. Juan Madrid es un escritor veterano especializado en "novela negra" y no engaña a nadie, no tiene detrás complejas campañas de marketing, no anda por las redes sociales haciéndose el simpático y regalando libros para evitar el "delito" del pirateo. Sus novelas son de entretenimiento, pero del bueno. Como escritor actúa a cara descubierta y de modo honrado. Buen oficio y bien desarrollado.
En esta novela nos introduce en la vida de un abogado, Liberto, que se ve envuelto sin quererlo en un asunto más complejo, las cosas parece que van por un camino, pero poco a poco se van desvelando como lo que son. No da tregua al lector, pero sin engañarlo. Conoce a sus personajes, los ambientes y los paisajes. Las descripciones son justas pero acertadas, la historia tiene bien ajustados los engranajes, aunque alguno chirría de vez en cuando, pero es aceptable. No tiene ninguna intención moralizante y nos culturiza lo justo. Por ponerle algunas pegas, el personaje principal en algunos pasajes de la historia y en algunos temas concretos (el amor) no actúa con la inteligencia que demuestra desde el inicio de la novela. El final es un poco apresurado, muy claro en un aspecto, pero algunos otros quedan un poco abstractos.
Autor recomendable, espero no tardar en volver a leerlo otros treinta años.
Benigno F.
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