Está claro que la memoria es frágil. A fuerza de ver este libro en la biblioteca siempre he estado convencido de haberlo leído. Me lo regalaron recién publicado por Siruela en esta magnífica edición que tras la cubierta oculta un autógrafo del autor, impreso en un papel excelente, con letra de suficiente tamaño para abarcar 170 páginas de color crudo, como si fuera un libro antiguo, pero el mío está como nuevo aunque data de 1990.
Recientemente, tras leer algún comentario sobre su autor me he puesto a hojearlo y me he dado cuenta de que sólo había leído la sobrecubierta, las páginas estaban sin tocar, ni una huella. A medida que iba leyendo he confirmado que no reconocía ni una palabra, ninguna situación. La verdad, es que a veces hasta que no pasa el tiempo no nos damos cuenta de la importancia de los regalos y este es uno de los buenos.
Esta novela se podría calificar como de aventuras, pero probablemente, si uno se fija en el subtexto, es algo más. Maqroll es un hombre perdido y solitario, pero qué pocos hombres conozco que no estén perdidos y sean (aunque no lo sepan) solitarios. También carece de esperanza pero todo lo mira con resignación, incluso con ilusión, por eso siempre está en busca de nuevas aventuras y por supuesto de nuevas compañeras. En esta novela las encuentra, unas con papel de madre, otras de amante.
También es una novela de amistad de la buena, de la noble, de la que no pregunta ni pide razones, y de disfrute de la vida, pero a diferencia de hoy en día, siendo conscientes de sus dificultades y sinsabores y de que tarde o temprano se acaba.
Alvaro Mutis probablemente, en la visión de Maqroll, sólo refleje la suya propia de bohemio y viajero. Es un maestro, de eso no hay duda, el hecho de condensar en solo 170 páginas tanta cultura, tanto sentimiento y además entretener sin irse por las ramas sólo lo consiguen los mejores.
Probablemente merecía el Premio Nobel. No ha tenido tiempo, falleció hace pocos años antes de que se acordaran de él. Y aunque todo se diluye con el tiempo, casi seguro que todavía resuena el sonido en esa cueva que habla en árabe llamando a su "almirante": "AL-Emir-Bar". Una novela cercana al término "imprescindible".
Si la había leído, no me importa haber perdido la memoria.
Benigno F.
Recientemente, tras leer algún comentario sobre su autor me he puesto a hojearlo y me he dado cuenta de que sólo había leído la sobrecubierta, las páginas estaban sin tocar, ni una huella. A medida que iba leyendo he confirmado que no reconocía ni una palabra, ninguna situación. La verdad, es que a veces hasta que no pasa el tiempo no nos damos cuenta de la importancia de los regalos y este es uno de los buenos.
Esta novela se podría calificar como de aventuras, pero probablemente, si uno se fija en el subtexto, es algo más. Maqroll es un hombre perdido y solitario, pero qué pocos hombres conozco que no estén perdidos y sean (aunque no lo sepan) solitarios. También carece de esperanza pero todo lo mira con resignación, incluso con ilusión, por eso siempre está en busca de nuevas aventuras y por supuesto de nuevas compañeras. En esta novela las encuentra, unas con papel de madre, otras de amante.
También es una novela de amistad de la buena, de la noble, de la que no pregunta ni pide razones, y de disfrute de la vida, pero a diferencia de hoy en día, siendo conscientes de sus dificultades y sinsabores y de que tarde o temprano se acaba.
Alvaro Mutis probablemente, en la visión de Maqroll, sólo refleje la suya propia de bohemio y viajero. Es un maestro, de eso no hay duda, el hecho de condensar en solo 170 páginas tanta cultura, tanto sentimiento y además entretener sin irse por las ramas sólo lo consiguen los mejores.
Probablemente merecía el Premio Nobel. No ha tenido tiempo, falleció hace pocos años antes de que se acordaran de él. Y aunque todo se diluye con el tiempo, casi seguro que todavía resuena el sonido en esa cueva que habla en árabe llamando a su "almirante": "AL-Emir-Bar". Una novela cercana al término "imprescindible".
Si la había leído, no me importa haber perdido la memoria.
Benigno F.
Comentarios
Publicar un comentario