Ir al contenido principal

Ojo por ojo - Anthony Trollope

Reconozco que las novelas del siglo XIX y en especial las ambientadas en la época victoriana siempre me han resultado atractivas. Hay autores muy interesantes en ese período y éste que nos ocupa era uno de los que no conocía.

He finalizado la lectura con cierto sabor agridulce y con ciertas dudas. Por una parte estoy tentado en ser radical en las incisiones y manejarlo burdamente con las manos, por otra pienso en un tratamiento atraumático con pinzas que no dejen marcas. Esas mismas que están casi ausentes en sus páginas.

Lo que sucede es que: la obra está bien, el escritor conoce su oficio, consigue que el lector se haga una perfecta representación mental de personajes, circunstancias y ambientes. Además es breve. Incluso invita a reflexionar sobre algo tan antiguo como la responsabilidad, el honor, la lealtad y la obediencia. Pero no toma partido, lo hace con tal imparcialidad (incluso para mí indiferencia), que todo ese esfuerzo literario da la sensación de haber sido objeto de algún tipo de contrato. Quizá el escritor no se sintiera libre para expresar explícitamente algunos de los hechos en esa época o, lo que es más probable, la obra haya sido escrita como parte de una obligación, con la misión (lícita por supuesto) de dar de comer al autor y a los suyos.

De hecho, al leer sobre el autor he comprobado que tras su muerte se publicó una "Autobiografía" en la que se reconocía como "un buen funcionario" a la hora de escribir sus novelas. Que lo hacía siguiendo un método totalmente estudiado. Los mismos pasos técnicos repetidos una y otra vez con parecidos resultados. Supongo que por eso fue tan prolífico.

Pese a todo, tiene calidad. No se dedica a rellenar páginas de cualquier forma. Tiene propósito, invita a la reflexión. Aunque en nuestro caso al leerla en otra época, las actitudes, las situaciones y los argumentos nos parecen un poco superados. Los miramos un poco por encima del hombro, pero si nos paramos, veremos que son los mismos errores en diferentes escenarios.

Lo mejor: No se anda por las ramas. La hábil descripción de los pensamientos de los personajes.
Una frase: "Hay mujeres que...., siempre piensan que hay que castigar a la mujer por pecadora y que hay que ayudar al hombre a escapar. La dureza de corazón de tales mujeres, que quizá en todas las demás facetas de la vida sean afectuosas y de carácter dulce, es uno de los aspectos más sorprendentes de nuestro sistema social."
Lo peor: El autor no se acaba de mojar, deja al lector la discusión y conclusiones de los resultados.

Puntuación: 6,5/10

Benigno F.

Comentarios

  1. Esa "imparcialidad" es precisamente una de las características fundamentales de Trollope!! Él casi nunca se moja; deja que sea el lector quien tenga a bien decidir, tal vez porque al propio autor le daba miedo ir más allá de ciertos valores que tenía como firmes. Es un escritor excelente, que huye conscientemente de los "excesos" de Dickens. Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Totalmente de acuerdo con tus apreciaciones. No tengo dudas sobre su excelencia y, efectivamente, carece de excesos, y esa linealidad es la que no alcanza a convencerme. Pero eso es sólo una apreciación personal.
      Gracias por pasar y comentar.

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Criticar, Opinar y Juzgar

crítico , ca . ( Del lat. critĭcus, y este del gr. κριτικός). 1. adj. Perteneciente o relativo a la crítica. 2. adj. Perteneciente o relativo a la crisis. 3. adj. Se dice del estado, momento, punto, etc., en que esta se produce. 4. adj. Dicho del tiempo, de un punto, de una ocasión, etc.: Más oportunos, o que deben aprovecharse o atenderse. 5. adj. Fís. Se dice de las condiciones a partir de las cuales se inicia una reacción nuclear en cadena. 6. m. y f. Persona que ejerce la crítica. 7. m. y f. coloq. Persona que habla culto, con afectación. 8. f. Examen y juicio acerca de alguien o algo y, en particular, el que se expresa públicamente sobre un espectáculo, un libro, una obra artística, etc. 9. f. Conjunto de los juicios públicos sobre una obra, un concierto, un espectáculo, etc. 10. f. Conjunto de las personas que, con una misma especialización, ejercen la crítica en los medios de difusión. Al estreno de e...

La Saga de Krosann - Sam Feuerbach

    Esta es una de esas sagas interminables de literatura fantástica por un autor desconocido. Se trata de  literatura sin complicaciones: principios simples, héroes y villanos, poderes mágicos. Ingredientes básicos, pero mezclados en buenas proporciones y por eso entretiene y engancha. No te complica la vida con numerosos personajes, razas y escenarios. Va directo al meollo y apenas hay pausas, ni alargadas e innecesarias descripciones de antecedentes y paisajes. Me faltaban algunos libros para rematarla (eso pensaba) y por eso he ido esperando y dejando esta entrada en borradores, esperaba que "La lanza del alma" (el cuarto) fuera el último de la serie y no ha sido así. Eso me ha dejado un poco decepcionado, pero con ganas de más. Supongo que como ahora tengo tiempo sobrado, no me importa perderlo con estas obras de puro entretenimiento. Tampoco voy a perderlo escribiendo más sobre ello porque, al fin y al cabo, esto es literatura para jóvenes, para engancharlos a la le...

Cadáveres en la playa - Ramiro Pinilla

Está es aparentemente una novela sencilla. Se lee en un suspiro, a muchos les parecerá con poca sustancia, pocas páginas, una más de detectives y sin mucho glamour porque no es americana. Otro español metido a imitador de Hammett o de Chandler. Pinilla es sencillo y dice las cosas con claridad, con tanta claridad y facilidad que las importantes pueden incluso pasar desapercibidas en medio de la labor investigadora. De hecho, en un análisis superficial, nos encontramos ante una simple novela, otra más de una saga detectivesca, en este caso de Samuel Esparza, el alter ego de un vendedor de libros y escritor vasco. Un simple ejercicio del escritor para llenar el tiempo entre grandes proyectos. Aún así, sin profundizar, es una magnífica obra que en otro ambiente u otro país hubiera vendido a espuertas, guión peliculero en Hollywood o serie televisiva. A nada de ello ha dado tiempo porque Pinilla sólo escribió tres y nos dejó después de ello. La novela, como todas las de Pinilla, est...