Ir al contenido principal

Velocidad de los jardines - Eloy Tizón


Cada vez me cuesta más hacerme con las filigranas líricas escritas. Igual es que me hago mayor o que tengo algo anestesiada la sensibilidad. Mientras iba leyendo este libro me he ido intranquilizando porque las palabras me rebotaban como si llevara un chaleco antipalabras bien grueso de kevlar y no había manera de hacerme con ninguna historia e incluso leía con algo de desprecio algunas frases supuestamente buenas.

Por suerte el libro sólo tiene ciento cincuenta páginas, treinta y cuatro de ellas de prólogo del propio autor. Igual ese ha sido el problema y me ha molestado que el propio autor se haga una autobiografía a la que no le he visto ningún interés, me ha parecido telegráfica y, sobre todo, pretenciosa. Seguramente es que a mí no me gusta que los desconocidos me cuenten su vida salvo cuando yo pregunto por ella. Es seguro que estoy bien advertido por mi familia contra los feriantes y llorones que sólo buscan timarte y, por eso, a veces menosprecio de forma injusta a personas que sólo quieren relatar sinceramente su periplo vital para enseñar que no adoctrinar. Con este escritor he tenido la sensación de que quería enseñarnos en ese prólogo sus "dimensiones personales" para que fueramos indulgentes con su obra a la vista de sus circunstancias.

Lo primero que se me ocurre al comentar este libro es que le sobran palabras para tan poco contenido (111 páginas efectivas o sea a unos 7,5 céntimos por página) porque seguramente el autor sabe sobre que escribe pero no tiene en cuenta en ningún momento para quién lo hace. Así deja ir sin ton ni son un montón de palabras que transforma en frases. Algunas aparentemente originales sólo por su cripticismo y otras casi extraordinarias salvo por su contexto frecuentemente inadecuado o desconocido.

Se trata de un libro de relatos, pero la mayor parte de ellos sin un argumento claro, dan la sensación de ser material de prácticas para entrenar metáforas imposibles y descripciones laberínticas que alejan más que centran. Los personajes no suelen tener ningún tipo de atributo definido salvo bonitas y bien regadas palabras. Igual alguien me dice que estoy corto de imaginación (quizás con razón), igual alguien dice que no son historias que son poemas. Yo creo que eso no lo sabe ni el propio escritor que deja al libre albedrío del lector los significados, sin tener en cuenta que para hacer eso hay que ser muy bueno o pillarte en el momento adecuado (seguramente no es el mío).

La verdad es que para su poco volumen se me ha hecho pesado. He empezado cada uno de los relatos con interés que rápidamente se ha visto sustituido por sopor (es lo que tiene leer en el autobús a las siete de la mañana) salvo en honrosas excepciones ya casi al final del libro que, reconozco, he acabado por compromiso, porque me fastidiaba darme por vencido ante tan poco volumen de papel y tan aplastantes palabras.

Dije al principio que al libro le sobraban palabras y poco a poco voy pensando que quizás lo que pasa es que le faltan, que igual la mayoría de las frases están recortadas, que el autor se ha hecho autocensura y por eso a veces es tan telegráfico. Igual alguien debería recordarle al escritor que para dar mensajes escuetos se debe ser muy claro y que antes de escribir un escritor debería plantearse en qué genero está trabajando.

Benigno F.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Criticar, Opinar y Juzgar

crítico , ca . ( Del lat. critĭcus, y este del gr. κριτικός). 1. adj. Perteneciente o relativo a la crítica. 2. adj. Perteneciente o relativo a la crisis. 3. adj. Se dice del estado, momento, punto, etc., en que esta se produce. 4. adj. Dicho del tiempo, de un punto, de una ocasión, etc.: Más oportunos, o que deben aprovecharse o atenderse. 5. adj. Fís. Se dice de las condiciones a partir de las cuales se inicia una reacción nuclear en cadena. 6. m. y f. Persona que ejerce la crítica. 7. m. y f. coloq. Persona que habla culto, con afectación. 8. f. Examen y juicio acerca de alguien o algo y, en particular, el que se expresa públicamente sobre un espectáculo, un libro, una obra artística, etc. 9. f. Conjunto de los juicios públicos sobre una obra, un concierto, un espectáculo, etc. 10. f. Conjunto de las personas que, con una misma especialización, ejercen la crítica en los medios de difusión. Al estreno de e...

La Saga de Krosann - Sam Feuerbach

    Esta es una de esas sagas interminables de literatura fantástica por un autor desconocido. Se trata de  literatura sin complicaciones: principios simples, héroes y villanos, poderes mágicos. Ingredientes básicos, pero mezclados en buenas proporciones y por eso entretiene y engancha. No te complica la vida con numerosos personajes, razas y escenarios. Va directo al meollo y apenas hay pausas, ni alargadas e innecesarias descripciones de antecedentes y paisajes. Me faltaban algunos libros para rematarla (eso pensaba) y por eso he ido esperando y dejando esta entrada en borradores, esperaba que "La lanza del alma" (el cuarto) fuera el último de la serie y no ha sido así. Eso me ha dejado un poco decepcionado, pero con ganas de más. Supongo que como ahora tengo tiempo sobrado, no me importa perderlo con estas obras de puro entretenimiento. Tampoco voy a perderlo escribiendo más sobre ello porque, al fin y al cabo, esto es literatura para jóvenes, para engancharlos a la le...

Cadáveres en la playa - Ramiro Pinilla

Está es aparentemente una novela sencilla. Se lee en un suspiro, a muchos les parecerá con poca sustancia, pocas páginas, una más de detectives y sin mucho glamour porque no es americana. Otro español metido a imitador de Hammett o de Chandler. Pinilla es sencillo y dice las cosas con claridad, con tanta claridad y facilidad que las importantes pueden incluso pasar desapercibidas en medio de la labor investigadora. De hecho, en un análisis superficial, nos encontramos ante una simple novela, otra más de una saga detectivesca, en este caso de Samuel Esparza, el alter ego de un vendedor de libros y escritor vasco. Un simple ejercicio del escritor para llenar el tiempo entre grandes proyectos. Aún así, sin profundizar, es una magnífica obra que en otro ambiente u otro país hubiera vendido a espuertas, guión peliculero en Hollywood o serie televisiva. A nada de ello ha dado tiempo porque Pinilla sólo escribió tres y nos dejó después de ello. La novela, como todas las de Pinilla, est...